En estos días de finales de
febrero de 2013 ha
atracado en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, donde estuvo hace una década
en su viaje inaugural, el crucero THE WORLD, un trasatlántico que a primera
vista nos parecería como otro cualquiera, e incluso, pasaría desapercibido al
lado de otros muy célebres, pero nada más lejos de la realidad.
Sus medidas no son espectaculares
comparadas con otros buques conocidos: 43.525 toneladas de registro bruto, 196,35 m . de eslora, 29,8 m . de manga, 6,7 m . de calado. Alcanza una
velocidad máxima de 18.5 nudos obtenidos gracias a dos máquinas Wärtsilä W 12 V
32 diesel (11,040 Hp). Su casco fue construido en los astilleros Öresundsvarvet
AB de Landskrona, al sur de Suecia, con el 71 como número de construcción. Fue
botado el 28 de febrero de 2001 y se remolcó hasta los astilleros Fosen
Mekaniske Verksteder en Rissa, Noruega y se entregó el 20 de febrero de 2002
con bandera de las Bahamas. Su número IMO es 9219331. El 29 de marzo de 2003
zarpó de Oslo con 70 pasajeros en su viaje de inauguración.
Dispone de 12 cubiertas, es decir
una gran cantidad de espacio, sin embargo, solo tiene 165 camarotes y una
capacidad para un máximo de 300 pasajeros y unos 250 tripulantes. Aquí comienzan
las diferencias.
Este barco nació gracias a la
idea que el naviero Knut U. Kloster (ex presidente de la Royal Viking Line y
Norwegian Cruise Lines), tuvo en 1995 de crear un barco que uniese alojamiento
permanente con un complejo hotelero de lujo, por supuesto, para gente muy rica.
Para ello reunió a grandes expertos en el sector y comenzó a materializar el
plan. El proyecto fue encargado a los arquitectos navales Petter Yran y BjØrn Storbraaten diseñadores de barcos de lujo,
los cuales consiguieron grandes espacios y no obviaron el más mínimo detalle. La
decoración se encargó a prestigiosos interioristas como Nina Campbell, JP
Molyneux o Luciano Di Pilla.
Los camarotes no se alquilan como
en el resto de los cruceros sino que se compran, con lo cual, los pasajeros son
a la vez propietarios. Para ello han tenido que pagar entre 2,5 y 8 millones de
euros, sin contar el mantenimiento; como en cualquier comunidad de propietarios
se tiene que hacer frente a gastos comunes como el combustible, la luz, el
agua, limpieza, sueldo de la tripulación… la cuota puede rondar los 15.000
euros al mes, todo ello administrado por ResidenSea con sede en Miramar,
Florida
Gran parte de los propietarios,
familias con niños incluidas, viven en el barco y el resto puede subir a bordo
en cualquier puerto donde atraque. Y esa es la otra característica, los
destinos son elegidos democráticamente por los viajeros mediante votación. Así
han visitado lugares no muy habituales para cruceros como la Antártida, por
ejemplo.
Los camarotes son apartamentos
perfectamente habilitados para vivir como en una casa normal. Los más pequeños
pueden medir unos 30,5 m² ,
decorados con un estilo neutro pero muy confortables, con un precio de 455.000 €;
otros son de uno o dos dormitorios con dos baños y servicio, salón y cocina; rondan
los 2.240.000 €, Las suites costaban 10.260.000 €. Todos están amueblados con
buen gusto y absolutamente equipados incluso con conexión a internet. La mayoría
dispone de terraza privada y a su disposición tienen servicio de limpieza, catering, lavandería y tintorería y
la conserjería funciona las 24 horas del día.
Posee varios restaurantes y bares
(Lobby Bar, el Marina, Club Nocturno Quantum, el Regata y el grill de la
piscina) donde se pueden degustar los platos más exóticos imaginables sin
olvidar dietas especiales como la Kosher, vegetarianas o para diabéticos. Aunque
si se quiere comer en “casa” se puede adquirir víveres en el super, o para ser
más exactos, en la tienda de delicatessen, también pudiéndose contar con chefs
que cocinen en el apartamento. Los fumadores tienen un club donde pueden gozar
de los puros más caros.
También dispone de tiendas
exclusivas, incluida una joyería, la única de la firma Graff en el mar. Se pueden
practicar deportes como jogging en una pista para ello, tenis en una cancha con
las medidas reglamentarias, dos piscinas, gimnasio, pista de paddle y un campo
de golf, cuyas bolas podrían caer al mar, ningún problema, son comestibles para
los peces. Una biblioteca, una sala de música y un teatro-cine satisfacen
necesidades culturales o se puede acudir al casino. También se puede acudir al
salón de belleza o al spa. Los adolescentes tienen su espacio donde pueden
conectarse a internet, jugar con videojuegos y, además, pueden hacer uso de dos
guitarras eléctricas y una batería. No se olvida la alimentación espiritual y
en una sala acondicionada a tal efecto, se celebran los oficios religiosos de
cualquier creencia. También se celebran bodas.
Pero también se puede acudir a clases de
baile, navegación, idiomas, cocina, pintura, artesanía, música, informática o
fotografía. No se descuidan los negocios, en los apartamentos se pueden montar
despachos y a bordo hay un centro de negocios y salas de conferencias con la más
avanzada tecnología. También se dispone de servicios de secretaría y fax a
parte de la ya mencionada conexión a internet, de alta velocidad, por supuesto.
Estos privilegiados turistas
pueden permitirse lujos extraordinarios en los destinos elegidos, como reservas
para ellos solos de los restaurantes más exclusivos, o experiencias inéditas
como ir en kajac por el Polo Sur rodeados de pingüinos. Y se quedan en los
puertos elegidos entre dos y cinco días aunque sea fondeando, porque THE WORLD
dispone de un puerto retráctil y unas graciosas barcas cubiertas que llevan a
los excursionistas a tierra con toda la comodidad, amén de poder practicar
deportes náuticos.
El itinerario elegido para el año
2013 dispuso salir del Caribe y algunos puertos de América del Sur, cruzar el
Atlántico para llegar a Canarias, estuvo fondeado unos días frente a la isla de
La Gomera procedente de Gran Canaria, permaneció tres días atracado en Santa
Cruz de Tenerife de donde saldrán rumbo a Arrecife de Lanzarote, de allí viajarán
hasta Marruecos y los puertos menos transitados de Europa. También navegarán
por la costa oeste de Irlanda, continuarán hacia el Mar Blanco, muy cerquita
del Círculo Polar Ártico. Lo siguiente será el Mar Negro y Oriente Medio. El
Año Nuevo lo recibirán en Madeira, volverán a pasar por Canarias, cruzarán el
Canal de Panamá, seguirán hacia Sudamérica, darán un salto hasta Nueva Zelanda,
Papua Nueva Guinea y las Islas Salomón, desde allí se adentrarán en Asia… Y
seguirán eligiendo destinos.
Han elegido vivir en el mar,
visitar localidades desconocidas, pueblos, razas, culturas; el espíritu
aventurero hecho lujo, pero espíritu aventurero en definitiva, un concepto romántico
del siglo XIX…¿O no? Si se vive en el mar ¿Se pagan impuestos?
C.G.I.
©escobén